Críticas de la Semana del Cine ULima y el Festival de Cine Europeo de Lima 2020

En las últimas dos semanas, coincidieron dos eventos cinematográficos de muy buen nivel que se llevaron a cabo en el formato de streaming y con acceso gratuito para todo el Perú. Comparto algunas críticas de las mejores películas que vi en ambas muestras.

Festival de Cine Europeo de Lima 2020


Lady Time
(Neiti Aika, Finlandia) es un extraordinario documental en el que la cineasta Elina Talvensaari reconstruye con cariño y rigor los fragmentos de la existencia de la mujer que vivió antes en el departamento que ella habita ahora. A pesar de que nunca la conoció personalmente, investiga todos los objetos que la difunta Sirkka-Liisa dejó en su hogar y a partir de ellos, intenta desentrañar el misterio de quién era esta persona que murió sin dejar herederos.

La película plantea una hipótesis incontestable: las pertenencias (fotografías, cartas, prendas de vestir) que almacenamos y conservamos cerca, ayudan a contar parte de nuestra vida, para entender quiénes somos, qué nos gusta, a quiénes amamos, qué eventos trascendentales quedaron grabados en objetos que tenemos a la mano.

Con la curiosidad de un investigador, la perspicacia de un detective y el talento de un buen narrador de historias, Talvensaari nos permite conocer la vida anónima de Sirkka-Liisa y recordarla con afecto, como si fuera un ser querido que dejó tras de sí varias pistas para encontrar un tesoro escondido. 

Este documental nos recuerda así que el cine nos permite establecer conexiones emocionales, aunque sean momentáneas, con personas de países lejanos y épocas pasadas que nunca conoceremos en persona, pero cuya vida nos recuerda algún aspecto de nosotros mismos. Calificación: 8/10.

Corpus Christi (Boże Ciało, Polonia) es un potente drama sobre la fuerza impetuosa que tiene la fe para generar grietas en entornos herméticos, dañados por el rencor y los prejuicios, logrando que se filtren el perdón y la redención, tanto para un ex convicto que finge ser sacerdote como para un pueblo herido a causa de una tragedia.

La puesta en escena del director Jan Komasa destaca por la precisión y el detallismo con los que dibuja el retrato de una sociedad polaca fuertemente influenciada por la religión católica, mientras los individuos libran una batalla entre torturarse con la culpa y el odio al otro, y acercarse a la posibilidad de reconciliarse con ello mismos y la comunidad.

El guion balancea con destreza los dilemas internos del protagonista (notable Bartosz Bielenia) y los conflictos externos del lugar que lo acoge sin sospechar su verdadera identidad, aunque la resolución de ambas trayectorias no tiene la misma contundencia que el resto del relato. De todos modos, se trata de una película que la mayor parte del tiempo fascina por su audacia y por la búsqueda de emociones que integren lo humano y lo divino. Calificación: 7/10.

Semana del Cine ULima 2020


Exilio (Exil, Kosovo) narra la creciente paranoia de un migrante kosovar en Alemania, que percibe que en su centro de trabajo y en la entrada de su hogar empiezan a multiplicarse las señales de un rechazo que él interpreta como discriminación y xenofobia.

El cineasta Visar Morina logra con inteligencia y sutileza que el espectador se involucre en el estado cada vez más perturbado del protagonista Xhafer (Mišel Matičević), a través del suspenso que generan los ataques de un adversario invisible (¿es una sola persona o es la sociedad en conjunto?), el uso del humor negro, así como una destacada paleta de colores, en la que los colores cálidos (de supuesta bienvenida) se tornan opacos o sombríos (sugiriendo una amenaza latente).

Como en la película francesa Sinónimos, en Exilio también observamos la perspectiva de un migrante que enfrenta situaciones de desarraigo en una nación europea, mientras intenta descifrar su propia identidad en un país con una cultura diferente. Sin victimizar ni enaltecer a su protagonista, Morina muestra al exilio como un estado mental del que es difícil escapar. Calificación: 7/10. 


Temblores (Guatemala) ofrece una mirada espeluznante e implacable sobre el choque entre el fundamentalismo de una familia evangélica y la decisión de uno de sus miembros de asumir su homosexualidad, lo que provoca la férrea determinación de intentar “curarlo” a través de terapias de conversión.

El director y guionista Jayro Bustamante analiza el papel preponderante que ocupa la religión en la sociedad guatemalteca (y latinoamericana, en general) para controlar y dictar cómo debe ser el comportamiento de los individuos y los grupos, ejerciendo drásticas sanciones si alguien se atreve a salirse del guion o cuestionar las reglas. Bustamante describe estas sectas como dictaduras que te reciben con un rostro amable, pero que buscan encerrarte en una camisa de fuerza.

Los temblores a los que alude el título se hacen presentes de forma literal en los movimientos telúricos que sacuden al protagonista Pablo (excelente Juan Pablo Olyslager) en dos momentos: cuando está con su familia ultraconservadora y luego cuando está en su nuevo hogar con el hombre que ama. Pero de forma figurada, sus cimientos interiores también son remecidos por el esfuerzo que hace él por liberarse de la aplastante presión social, familiar y religiosa. Es un relato de supervivencia, en el que cada terremoto causa más estragos que el anterior. Calificación: 7/10.

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