Karaoke VIP

¿Quién dijo que las gordas no tienen ritmo? Sólo basta ver a Tracy Turnblad (Nikki Blonsky) y su madre Edna (John Travolta) moviendo sus adiposos cuerpos con bastante energía al son de la pegajosa música de los años 60 para contagiarse del espíritu alegre y despreocupado de Hairspray.

Tracy y su mejor amiga Penny (Amanda Bynes) asisten a un casting para incorporarse al Show de Corny Collins, un programa de TV del cual son fanáticas. A pesar de que en un principio rechazan a Tracy por su sobrepeso, luego la ven bailar y la aceptan en el programa. Una vez dentro, ella se enamora del cantante Link Larkin (Zac Efron) e intenta integrar a chicos negros en el elenco, un atrevimiento impensable en el Baltimore de los años 60.

Hairspray tiene una procedencia parecida a otro musical “reciente” como The Producers: la historia nació en una película estrenada hace décadas, que luego inspiró una obra musical de Broadway y ahora vuelve al cine. Entonces, se podría decir que es como si hubieran invitado a varias estrellas de Hollywood a un karaoke VIP para que canten los grandes éxitos de un musical tan conocido que tiene su propio culto.

Lo más satisfactorio de esta nueva versión de Hairspray es que los actores forman un grupo compacto y afinado. Se trata de una convergencia de nuevos talentos (desde la debutante Nikki Blonsky hasta la estrella de High School Musical, Zac Efron) con viejas glorias de Hollywood, quienes demuestran vigencia y ganas de divertirse como locos. Por un lado, tenemos a la siempre sensual Michelle Pfeiffer en el papel de Velma Von Tussle, una deliciosa villana que conserva la mirada provocativa de Gatúbela (personaje que ella inmortalizó en Batman Returns). En un papel secundario, pero muy gracioso, está Christopher Walken como el distraído padre de Tracy, quien además tiene una tienda de bromas y extravagancias tales como cojines que sueltan flatulencias. Y camuflándose en kilos de maquillaje, destaca John Travolta como Edna, la tímida, desconfiada y sobreprotectora madre de Tracy.

Sin ser un musical especialmente original, es un espectáculo sumamente divertido. Es al mismo tiempo un desfile de situaciones disparatadas, vestidos de todos los colores imaginables, peinados estáticos gracias a la laca y estudiadas coreografías. Pero también es una historia de tolerancia a la diversidad, de integración y de aceptación de uno mismo, más o menos en la línea de Happy Feet, otro musical que privilegiaba los mismos mensajes a través de vistosos números de canto y baile.

Ya que hablamos de musicales, aprovecho para manifestar mis altísimas expectativas por otro estreno del género que amenaza con derramar chorros de sangre en la cartelera navideña. Se trata de Sweeney Todd, dirigido por Tim Burton y protagonizado por Johnny Depp, Helena Bonham Carter y Sacha Baron Cohen. A diferencia de Hairspray, esta película promete ser mucho más sombría, perversa y violenta. En el extraño mundo de Burton, los personajes más raros terminan siendo los más entrañables. ¿Será la excepción la historia de este barbero que prepara pasteles de carne con las vísceras de sus víctimas? Próximamente lo descubriremos.

Título original: Hairspray
País y Año: Estados Unidos, 2007
Director: Adam Shankman
Actores: Nikki Blonsky, John Travolta, Michelle Pfeiffer, Christopher Walken, Zac Efron, Amanda Bynes, Queen Latifah.
Calificación: *** 1/2

Comentarios

eduardo ha dicho que…
buena reseña, pesimo titulo :(

p.d. Hairspray por el oscar!!! HAHAHAHAHA

yo realmente no tengo muchas esperanzas en Sweeney Todd, pero igual y termina sorprendiendome
Juan Carlos Ugarelli ha dicho que…
Tienes razón, el titular estaba malo, así que he rebautizado el post.

Espero que Sweeney Tood sea tan buena como parece. El trailer es alucinante.

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