La nieve cae sobre todos

La habitación de al lado (The Room Next Door, España / Estados Unidos, 2024) continúa ese enfrentamiento con la mortalidad que Pedro Almodóvar ha venido explorando en sus últimas películas, como Dolor y Gloria y Madres Paralelas, con la diferencia de que aquí las reflexiones sobre el fin de la propia existencia y sobre el legado que se deja antes de partir se enmarcan dentro del debate sobre la eutanasia y el derecho a una muerte digna. A pesar de que el guion aborda temas espinosos, el tono de la película jamás es pesado ni sombrío. Por el contrario, es un drama con tintes de humor negro que evidencia una mirada humanista.

Durante una firma de libros, la novelista Ingrid (Julianne Moore) se reencuentra con una conocida, quien le informa que una amiga en común, Martha (Tilda Swinton) se encuentra internada luego de recibir el diagnóstico de una enfermedad terminal. Ingrid visita a Martha en el hospital y retoman su amistad. En el contexto de esa situación crítica, Martha le pide algo muy delicado a Ingrid.

En su primer largometraje en idioma inglés, el cineasta español Pedro Almodóvar se ha basado en la novela What Are You Going Through de Sigrid Nunez y la ha adaptado a su propio universo temático. Por ejemplo, las protagonistas femeninas y la relación que se establece entre ellas tienen las marcas del cineasta manchego. El personaje de Martha es una heroína almodovariana en toda regla: una mujer fuerte, decidida y valiente, que no le pide permiso a nadie para tomar las riendas de su vida y enfrentar cualquier obstáculo que se le presente en el camino. En este caso: la muerte.

Las actuaciones de Tilda Swinton y Julianne Moore son notables, en la medida en la que ambas encuentran las dosis exactas de humanidad, empatía, dignidad y generosidad, sin caer jamás en el sentimentalismo o la exacerbación del dolor. La película vuela más alto cuando ellas están juntas en pantalla, pero se resiente ligeramente cuando desvía la atención a un par de flashbacks que narran la juventud de Martha y que no tienen la misma potencia dramática que las escenas ambientadas en la actualidad.

A nivel visual, como en toda obra de Almodóvar destaca el uso de colores primarios y cálidos, que contrastan con el tema potencialmente lúgubre de la muerte. El clásico rojo que ilumina todas sus películas se hace presente en el vestuario y la utilería, transmitiendo el atrevimiento y la osadía. El traje amarillo que usa Tilda en una escena muy importante es una declaración del optimismo y la determinación con los que ella afronta sus problemas. El verde que suele usar el personaje de Julianne representa el equilibrio, la resistencia y la estabilidad.

La habitación de al lado ofrece una reflexión lúcida y sensible sobre el derecho a una muerte digna. Al mismo tiempo, es una celebración de los placeres de la vida y la amistad femenina, mientras alerta sobre los peligros del cambio climático y la arremetida de los grupos conservadores y de ultraderecha. Pero también es una película llena de referencias (a Persona de Bergman, a Vértigo de Hitchcock, a la obra de Edward Hopper) y de múltiples capas que Almodóvar nos invita a desmenuzar y analizar, como la evocadora nieve que cae en tres momentos distintos y que representa la muerte: la precipitación de algo que lenta e inevitablemente cae sobre todos y los sepulta.

Calificación: 9/10.

Esta película está actualmente en la cartelera peruana.