Suzume: Los terremotos como alegoría de los traumas del pasado

Suzume (Suzume no tojimari, Japón 2022) es una película de animación, tan impresionante a nivel visual como emocionante a nivel narrativo, que conecta lo íntimo y lo cósmico, la tragedia personal con la historia de un país. En medio de una historia de crecimiento y romance, los terremotos se presentan como una metáfora de esos cambios drásticos que transforman el curso de la vida de una persona, remeciendo los cimientos, ocasionando pérdidas humanas y materiales, quebrando los vínculos que nos conectan con lugares y personas.

En un pueblo del suroeste de Japón, viven Suzume, de 17 años, y su tía, quien se convirtió en su tutora legal luego del fallecimiento de su madre. Cuando Suzume conoce al misterioso Souta, se siente inmediatamente atraída hacia él y lo sigue hacia una casa abandonada en las montañas, donde él intenta cerrar una puerta que es en realidad el portal hacia otro mundo, de donde vienen fuerzas incontrolables que están ocasionando terremotos en todo el país.

A partir de entonces, la película se vuelve una road movie cuando Suzume y Souta (transformado en un objeto muy peculiar) se ven obligados a viajar a distintos lugares de Japón intentando cerrar las puertas que podrían prevenir el surgimiento de nuevos movimientos telúricos. Y al mismo tiempo, vamos descubriendo cómo el pasado de Suzume está ligado a la misión que repentinamente ha asumido.

Gracias a películas como El jardín de las palabras, Your Name y El tiempo contigo, el director Makoto Shinkai se ha convertido en uno de los nombres clave de la animación japonesa y ha sido considerado por muchos como el sucesor de Hayao Miyazaki. Al margen de las comparaciones y las coincidencias que pueda haber en sus filmografías, Shinkai es un autor que tiene un estilo fácilmente reconocible tanto a nivel visual como narrativo. 

En Suzume, Shinkai vuelve a demostrar su maestría para crear universos fascinantes, en los que asombra el esplendor visual de esos paisajes marítimos bañados por los rayos solares o la forma de representar los movimientos sísmicos como unos gusanos de fuego que siembran destrucción a su paso. Tanto en interiores como en exteriores, en el campo o la ciudad, la animación de Shinkai emana calidez e invita a admirar el detallismo con el que cada elemento del encuadre cobra vida.

Suzume consigue atar el romance adolescente, la aventura, la comedia de situaciones, el road movie y el drama familiar en un solo conjunto satisfactorio, en el cual el hecho de cerrar esos portales que ocasionan catástrofes, implica para la protagonista un proceso de madurez, de viaje interior y de reconciliación con los traumas del pasado. Su historia personal, marcada por la pérdida y el quiebre de las estructuras familiares, refleja la experiencia colectiva de Japón, un país que ha sido tantas veces azotado por los terremotos, tantas veces destruido y reconstruido, que ha marcado la resiliencia y fortaleza de su población.

Calificación: 8/10.

Esta película está actualmente en la cartelera peruana.